viernes, 21 de junio de 2013

PENSAMIENTO CRÍTICO

El pensamiento crítico es una habilidad valiosa para las personas de todas las edades. Ser capaz de aplicar el pensamiento crítico puede ayudar a los niños a desarrollar el razonamiento y la lógica necesaria para resolver problemas y considerar diferentes perspectivas.


Podemos ayudar a los niños en el descubrimiento de algunas de sus posibilidades intelectuales al animarles a pensar de manera crítica siguiendo los siguientes pasos:

1
Ayudar a que nuestros alumnos desarrollen un pensamiento crítico haciéndoles preguntas. Planteándoles algunas que no puedan ser respondidas con un simple "sí" o "no" y que requieran una gran cantidad de información detallada. Este tipo de preguntas pueden animar a los niños a responder en detalle sin tener que preocuparse de si están o no dando la respuesta correcta.
2
Inculcar en nuestros alumnos el valor de hacer preguntas y sobre todo de cuestionar los supuestos y premisas, que son el corazón del pensamiento crítico. Hacerles ver que nunca deben tener miedo de hacer preguntas. Hacerles saber que si no están seguros acerca de algo, tienen que preguntar. Los maestros debemos hacer el esfuerzo para responderles de la manera más eficaz y precisa que podamos. Además, debemos hacer un esfuerzo especial para mostrarles nuestro interés cuando respondemos a sus preguntas. Nunca debe  parecer que lo hacemos como una tarea.
3
Fomentar la lectura. La lectura es otro de los caminos para el pensamiento crítico. La lectura hace que un niño utilice la creatividad, parte esencial del pensamiento crítico.
4
Una actividad que puede ayudar a ejercitar las habilidades de pensamiento crítico de un niño es la toma de decisiones. Enseñar a los niños a tomar decisiones y a comparar  lo que es bueno y malo acerca de algo antes de llegar a una decisión final. Debemos enséñales a cuestionar los supuestos y premisas fáciles y el proceso lógico que conduce a conclusiones. Si toman una decisión de la que más tarde se arrepienten, debemos ayudarles a entender que el error es una oportunidad para aprender.
5
Discutir con nuestros alumnos la organización de la información. Al ayudar a los niños a pensar críticamente, fomentamos su primer intento de romper la información en secciones más pequeñas. Cuanto más pequeñas sean las secciones de información, más fácil pueden ser evaluadas. 
6
Pedirles que den una respuesta por su cuenta. Si un niño hace una pregunta, pedirle de vez en cuando que él trate de responder por su cuenta. Ofrecerle un poco de práctica en las habilidades de pensamiento crítico, desde la comparación de los puntos buenos y malos hasta la consideración de la causa de una situación o un concepto.
7
Estimular la inteligencia de nuestros alumnos. Debemos refrescarles la mente al hacer que solucionen problemas a través de juegos y tareas. Combinando las posibilidades que nos ofrece el uso de problemas aritméticos, rompecabezas y juegos de mesa que incluyan la ortografía y la formación de palabras.
8
Por último, debemos ser pacientes. Contestando las preguntas curiosas de un niño o escuchando sus hipótesis, y siempre mostrando el mayor interés en lo que está haciendo. Nuestra atención puede servir como parte del refuerzo y apoyo que necesitan para continuar mejorando sus habilidades de pensamiento crítico.

miércoles, 12 de junio de 2013

LA IMPORTANCIA DE LA EMPATÍA EN EDUCACIÓN

La empatía consiste en “ponerse en el lugar de los demás”, es la capacidad que nos permite entender los sentimientos, actitudes y comportamientos de otras personas.
 No implica sentir compasión, sino comprensión.
 No implica justificar sus actos, solo entenderlos.
Partiendo de estas premisas, podremos avanzar un paso más en la búsqueda de posibles alternativas ante la presencia de un problema, especialmente porque podremos aplicar el principio de reversibilidad en nuestra mente.
Este principio consiste en plantearse la posibilidad de que la dirección de nuestro pensamiento esté yendo en una dirección equivocada, y por lo tanto, quizá debamos cambiar la perspectiva.


Un ejemplo claro lo podemos hallar cuando ejercemos la labor de maestros o maestras. Ante el reto de educar a un niño que tiene una conducta negativa, la primera idea que nos suele venir a la cabeza es la de ¿cómo puedo hacer para que modifique su comportamiento?. Eso nos lleva a toda una serie de ideas y acciones para que ese niño se “porte bien”, como intentar con castigos, riñas, ignorarle, etc…
Cuando lo que deberíamos hacer es plantearnos las siguientes preguntas:
1.  ¿Siempre se ha portado así?
Es probable que la respuesta sea negativa. Nadie tiene un comportamiento fijo, sino que cambia según vamos experimentando con la vida y las personas que nos rodean.
2. ¿Cuándo empezó a portarse así?
Suele haber un antes y un después,  aunque no siempre somos conscientes de ello.
3. ¿Qué hay detrás de un niño que empieza a suspender cuando siempre sacaba buenas notas?
Quizá debemos indagar en el motivo por el que ahora no hace bien las cosas: ¿le atendimos adecuadamente cuando lo hacía bien?
4. ¿Qué hay detrás de un niño que siempre ha sido obediente y de pronto empieza a desafiar a sus figuras de autoridad?
Quizá debemos empezar a pensar que cuestionárselo todo es parte necesaria de su aprendizaje.
5. ¿Qué hay detrás de un niño con mirada triste?
A veces sobrevaloramos la sensación de felicidad en la infancia, pero cuando la tristeza de un niño se prolonga en el tiempo, es señal de que está sintiendo algo importante y necesita apoyo.

Por último debemos reflexionar y aplicarnos la autocrítica para comprender cómo se sienten nuestros alumnos.

domingo, 9 de junio de 2013

Aprender Imitando

Aprendizaje vicario o social

Habitualmente, se considera el aprendizaje como una actividad que se realiza de forma individual, ya sea estudiando, escuchando o recopilando información.
Pero esta no es la única forma en que se puede aprender. Cuando somos niños, todo lo aprendemos observando a los demás, imitando sus conductas, acciones, etc., y durante toda nuestra vida mantenemos esa capacidad de aprender observando a los demás y a través de la experiencia de otros, gracias a lo que se conoce como aprendizaje vicario.
Este concepto fue propuesto por primera vez por el psicólogo Albert Bandura en 1977, dentro de su Teoría del aprendizaje social en 1977, en la que desvelaba la capacidad de los seres humanos de aprender siguiendo los modelos vistos en otras personas con las que el que aprende tiene una relación estrecha.
A través de la observación de los otros, también captamos las consecuencias positivas o negativas de las acciones de los demás, y las integramos como si fueran experiencias propias. Cuando somos niños, si observamos que un amigo o hermano es premiado después de realizar una buena acción, tenderemos a imitarla, pero si vemos que es castigado después de hacer algo mal, evitaremos dicho comportamiento, y esto mismo lo haremos cuando somos adultos.
Uno de los requisitos para que se dé este aprendizaje es la atención. Aprenderemos más en las situaciones nuevas, en aquellas en las que están implicadas personas que son importantes para nosotros o en situaciones relacionadas con hechos o actos que son importantes para nosotros.
La retención y la reproducción, es decir, recordar e imitar lo que hemos aprendido también es esencial para que se produzca el aprendizaje. De este modo, se irá interiorizando más, y el aprendizaje será mayor.


miércoles, 5 de junio de 2013

Aprendizaje intencional y aprendizaje incidental

Teniendo en cuenta la actividad que el alumno debe llevar a cabo para lograr un aprendizaje basado en la comprensión, es importante distinguir entre aprendizaje intencional y aprendizaje incidental.

El primero se produce cuando el educando tiene la intención de aprender, es un proceso activo, estratégico, constructivo y dirigido a una meta. El segundo tiene lugar cuando no existe la intención. Es decir, fuera de una situación intencional de enseñanza o de aprendizaje. Se puede considerar que es lo que ocurre cuando un niño aprende, de manera natural, a hablar, a ampliar su vocabulario, incluso a gatear o caminar. Muchas habilidades se aprenden de manera incidental.

Desde un punto de vista intuitivo, podría pensarse que el aprendizaje intencional ofrecerá mejores resultados sobre el incidental; sin embargo, dicho aprendizaje depende del tipo de procesamiento realizado por el alumno.

Aunque haya práctica repetida e intencional de una actividad, si esta no va dirigida a la comprensión, los alumnos obtendrán resultados mediocres. Por el contrario, si la práctica es escasa y casual, pero favorece la comprensión, los resultados del aprendizaje serán mayores.

Un ejemplo cotidiano de lo anterior se produce cuando comparamos el poco rendimiento obtenido por los profesores después de dar explicaciones exhaustivas y lógicas (significativas para ellos pero no para los alumnos), con la enorme eficacia que parecen tener las actividades espontáneas de los alumnos en sus juegos. En el primer caso, la actividad se lleva a cabo con la intención de enseñar, mientras en el segundo ésta no existe. Sin embargo, el resultado de la actividad incidental parece tener mejores resultados.

De todo lo anterior se deduce que el aprendizaje debe basarse en la comprensión. 

domingo, 12 de mayo de 2013

Enseñarás a volar



Enseñarás a volar,
pero no volarán tu 
vuelo.

Enseñarás a soñar,
pero no soñarán tu sueño.

Enseñarás a vivir,
pero no vivirán tu vida.

Sin embargo...
en cada vuelo,
en cada vida, en cada sueño,
perdurará siempre la huella,
del camino enseñado.

Por: Madre Teresa de Calcuta

sábado, 11 de mayo de 2013

AUTOCONCEPTO Y ESCUELA



El niño empieza a formarse una idea sobre sí mismo desde muy pequeño. Sus primeras experiencias y la forma en que los demás respondan a sus comportamientos van a influir decisivamente en la imagen que se creará de sí mismo.

Si el niño piensa que consigue lo que se espera de él, se sentirá cada vez más capacitado para intentar nuevos logros. Pero si cree que éstos no están a la altura de lo esperado, su concepto de sí mismo irá debilitándose, y también su autoestima.

Para conseguir un autoconcepto positivo es importante:

  • Tener presente que nadie es perfecto, y que equivocarse es el primer paso de un aprendizaje significativo.
  • Hacerles ver que ellos son los principales responsables de sus propios pensamientos, emociones y acciones.
  • Observar cómo piensan, sienten y actúan cuando descubren que no son perfectos.
  • Ayudarles a cambiar las actitudes y a modificar sus pensamientos negativos.


Para ayudar a cambiar un autoconcepto negativo es importante:

Fomentar un ambiente libre de fracasos, haciéndoles ver que todos nos equivocamos y que todas las experiencias son un éxito. Esto dará lugar al pensamiento “soy bueno, soy capaz y me aprecian”, lo que favorecerá el desarrollo del optimismo necesario para realizar esfuerzos, establecer relaciones interpersonales saludables, afrontar nuevos retos,…

Cuando el autoconcepto es negativo, es necesario que les facilitemos experiencias en las que con total seguridad alcancen el éxito, ofreciéndoles la oportunidad de alcanzar ese necesario optimismo. Son muy importantes los elogios y estímulos que refuerzan los logros.

El ayudar a los niños a desarrollar un buen autoconcepto es una de las tareas más importantes de la escuela. El niño con buen autoconcepto tiene muchas probabilidades de ser un adulto feliz y exitoso. Un autoconcepto positivo es un factor importante en el ajuste emocional y social. Por otra parte, un autoconcepto negativo produce un comportamiento inseguro y desconfiado ante el mundo.

viernes, 10 de mayo de 2013

Roles de Género y Estereotipos


Diferencias de género.


En los primeros años de escuela infantil ya han aparecido diversas diferencias de género notables. Una de ellas tiene que ver con la preferencia de juguetes y juegos. Hacia los 2 o 3 años, las niñas juegan a amas de casa y a maestras, mientras que los niños juegan con camiones de juguete, tractores y coches de bomberos. Estas diferencias pueden deberse a causas biológicas ya que aparecen tan pronto, pero también es cierto que ya han transcurrido varios años en los que puede haberse producido algún tipo de influencia social y familiar.

Otra diferencia muy temprana es la correspondiente a la conducta agresiva. En el momento en el que ésta aparece en los niños, hacia los 2 años, surgen diferencias de género: los niños son más agresivos que las niñas. Esta diferencia persiste durante los años de escolarización.

La socialización.

La influencia social relativa a los papeles asignados a los géneros tiene una gran importancia durante la niñez. El término socialización se refiere a las formas que utiliza la sociedad para transmitir a las personas las expectativas que tiene aquélla con respecto a su conducta. La misma familia inmediata del niño puede comenzar a tener distintas expectativas con respecto a él. Por ejemplo, se puede esperar de las niñas que ayuden a poner la mesa y de los niños que saquen la basura. Por otro lado, la cultura, en general, también tiene una enorme influencia.
El entorno escolar transmite también en algunas ocasiones la información sobre los papeles estereotipados asignados a los géneros.
Los medios de comunicación son poderosos agentes socializadores. A menudo pensamos que las cosas han cambiado mucho en los últimos veinte años y que los estereotipos de género son cosas del pasado, pero las cosas no han cambiado tanto. La televisión (tanto en los programas como en los anuncios) sigue presentando papeles estereotipados.

En los anuncios de televisión el narrador suele ser un hombre. Los pocos anuncios que cuentan con una narradora, la mujer no se dirige a la audiencia, sino a perros, gatos, bebés y a mujeres que estén haciendo dietas. En algunas ocasiones, se han detectado ciertas tendencias a huir de los estereotipos. Por ejemplo, en los anuncios, los hombres van apareciendo cada vez más en el papel de esposo o padre.
También se dan variaciones considerables entre las familias en cuanto a la forma de socializar a niños y niñas con respecto a los papeles asignados a cada género. Los padres muy "liberados" pueden estar muy pendientes de dar coches de juguete a sus hijas para que jueguen y muñecas a sus hijos, así como de asegurar que padre y madre se reparten por igual las tareas domésticas y de cuidado y atención de sus hijos. Es probable que una familia más tradicional estimule en mayor grado los papeles tradicionales.

Conductas "masculinas"

Las conductas que se apartan del estereotipo se toleran mucho menos a los niños que a las niñas. Muchos padres aceptan que sus hijas suban a los árboles y jueguen al fútbol, pero se molestarían mucho si un hijo jugara con muñecas. La exigencia de que los niños se adapten a las ideas sociales aparece mucho antes y con mucha más insistencia que la actitud semejante con respecto a las niñas.
Las presiones más fuertes para la adopción de papeles estereotipados de su género no se producen hasta la adolescencia. Durante la mayor parte de su infancia, las niñas gozan de libertad para hacer lo que quieran y es más tarde cuando se les dice que no deben comportarse de determinadas maneras. 
En cualquier caso,  es necesario erradicar y evitar que las creencias culturales respecto al rol de los hombres y las mujeres, que aún perduran en la sociedad, intervengan en la educación, para así lograr la igualdad de oportunidades para niños y niñas.

jueves, 9 de mayo de 2013

Enseñanza Creativa


Recopilando algunas de las ideas aprendidas a lo largo de este primer curso, ahora que se acerca el final, he intentado resumir los pasos necesarios para conseguir enseñar de manera creativa y utilizar de la forma más efectiva posible la clase:
  • Analizar si estamos siendo unos maestros creativos. Primero necesitamos despertar nuestra propia creatividad, sólo así la proyectaremos hacia los alumnos. Debemos conocer la naturaleza de nuestra asignatura y cómo podemos darle un toque innovador.
  • Tener en cuenta lo que los alumnos necesitan. Debemos tener conciencia del nivel de enseñanza en el que están y la cantidad de información que pueden procesar.
  • Estudiar a los alumnos. Recordar sus nombres, conocer sus aspiraciones,….  Hablar con ellos sobre sus gustos y también sobre lo que les desagrada. Analizar el carácter de cada alumno para poder ayudarlos, hacerles sentir cómodos y seguros al mismo tiempo.
  • Variar e intercalar las herramientas didácticas. Utilizar actividades dinámicas para mantener su atención, organizar juegos para motivarlos, relacionar actividades que a ellos les gustan con los contenidos,…
  • Cambiar el escenario. No dejar que el ambiente de clase sea siempre el mismo; cambiar de lugar las mesas y las sillas de vez en cuando; y también la disposición de los alumnos, formando grupos que se vayan modificando para que todos los alumnos se relacionen entre sí.
  • Ser flexibles. Ser capaces de enfrentarse constructivamente con hechos imprevistos, con cambios de última hora en programas y planes, y con nuevas situaciones que se originan en la realización de las actividades. Ser espontáneos, capaces de reaccionar rápidamente y con confianza ante los acontecimientos.
  • No limitar los resultados. Dejar libertad a los alumnos para desarrollarse hasta el máximo y guiarles en este desarrollo. Motivarlos a llegar más lejos y felicitarlos cuando logren avances.
La educación creativa responde a los nuevos modelos de enseñanza centrados en el alumno. La preparación para el trabajo autónomo, el aprendizaje de habilidades cognitivas, la adaptación a situaciones nuevas y desconocidas, el desarrollo del espíritu emprendedor y la capacidad creativa, la diversificación en las formas de aprender y de enseñar, surgen como demandas de una formación innovadora. 

El interés por la creatividad responde a las nuevas demandas por generar cambios en los procesos formativos en todos los niveles educativos, ante escenarios generados por las nuevas tecnologías de la información, el acelerado avance de la ciencia, la globalización e internalización de las instituciones y las problemáticas sociales.

La creatividad es hoy en día parte de nuestra existencia, es un desafío a la manifestación de la libertad y del poder de la independencia de la mente humana.
El aprendizaje creativo exige compromiso activo, motivación, esfuerzo, implicación para lograr como resultado un cambio en la comprensión, ampliar las capacidades humanas y percibir relaciones significativas entre la nueva información y el conocimiento previo del alumno.

El maestro de la enseñanza creativa se caracteriza por:
Respetar el derecho de sus estudiantes a crecer y desarrollarse personal y psicológicamente, a equivocarse y a que sus errores se conviertan en aprendizaje.
- Facilitar la autonomía del alumno, su participación y la expresión de su creatividad.
-  Pensar y enseñar creativamente.
-  Premiar los esfuerzos creativos.

Todos los estudiantes poseen un potencial creativo, que lo podrán desarrollar si se les proporcionan actividades que despierten su interés y si se les permite investigar y explorar. La experimentación les llevará a utilizar su imaginación para buscar miles de respuestas –unas correctas, otras incorrectas- utilizando al final del proceso la respuesta que considere indicada.

Educar en la creatividad es educar para el cambio y formar personas ricas en originalidad, flexibilidad, visión futura, iniciativa, confianza, personas listas para afrontar los obstáculos y problemas que se les van presentando en su vida escolar y cotidiana, además de ofrecerles herramientas para la innovación.


domingo, 5 de mayo de 2013

AULAS FELICES

Durante este largo puente de Mayo que hoy termina, he estado preparando esta entrada para el Blog acerca de la Psicología Positiva, porque me parecía muy interesante. Además, al llegar de vacaciones he visto que el profe termina la asignatura con el mismo tema. Así que os lo pongo, creo que puede servir como pequeño resumen. 

LA PSICOLOGÍA POSITIVA
La Psicología Positiva surgió en Estados Unidos, a finales de la década de los noventa, como respuesta a una visión “reparadora” de la psicología. Impulsada inicialmente por Martin Seligman, la psicología positiva es un movimiento que, frente a la evidencia de que la Psicología se ha centrado preferentemente en los aspectos patológicos de la persona y en aportar soluciones a los mismos, propone una nueva  investigación y promoción de los aspectos positivos en el ser humano.
Seligman y Csikszentmihalyi (2000) explicaban que “el propósito de la Psicología Positiva consiste en comenzar a catalizar un cambio en el foco de la Psicología, superando la preocupación única en reparar las peores cosas de la vida, en pos de la construcción de cualidades positivas“.





APLICACIONES DE LA PSICOLOGÍA POSITIVA A LA EDUCACIÓN
¿Cómo se pueden llevar a las aulas los principios de la Psicología Positiva ?… ¿Cómo se puede poner en práctica y por qué es necesario?…
La primera idea clave de la Psicología Positiva es su propósito para:
CONSTRUIR LA BASE DE UNA CIENCIA DE LA FELICIDAD.
La aplicación educativa de la Psicología Positiva permite fijar como primer objetivo educativo:
Capacitar a los niños y jóvenes para desplegar al máximo sus aspectos positivos, sus fortalezas personales, y potenciar su bienestar  presente y futuro (Arguís Rey, Bolsas, Hernández, Salvador, 2010: 7)
Con frecuencia en los Proyectos Educativos o en las Programaciones Didácticas, se centra la atención en la consecución de los objetivos de aprendizaje. A pesar de que con la L.O.E. se introdujeron dentro de los objetivos educativos que debe alcanzar el alumno, no sólo los conceptos, sino también los procedimientos y las actitudes, y de igual modo, las competencias básicas incluyeron el desarrollo de habilidades y capacidades, que no sólo pertenecían a la esfera cognitiva sino también a la educación emocional (como son la competencia para aprender a aprender o la Autonomía e Iniciativa personal), el cambio no ha tenido lugar realmente. Nos encontramos que todavía priman, en la tarea diaria de muchos docentes, las metas y objetivos exclusivamente “académicos”. Se confía en que los alumnos, comprometiéndose a un proceso de aprendizaje basado en el desarrollo de sus conocimientos, destrezas y actitudes, algún día conseguirán alcanzar el trabajo que les gusta, el futuro que anhelan…en definitiva, en el futuro encontrarán la felicidad. Ese futuro: “ser felices” se cree que vendrá como consecuencia de su paso por la escuela…,pero:
¿Qué pasa hoy? ¿Realmente los maestros ayudan a los alumnos a ser felices hoy? ¿Lo contemplan como uno de los objetivos del centro, objetivo de área o de curso?
Algunos de los programas educativos que se están iniciando actualmente, basados en la aplicación de la Psicología Positiva a la educación, nos dan la respuesta. Por ejemplo el programa: AULAS FELICES.
Aulas Felices es un programa de intervención educativa diseñado dentro del marco conceptual de la Psicología Positiva. Se trata de un programa que ayuda a potenciar el desarrollo personal y social de los alumnos, que se estructura adecuándose a los programas de Acción Tutorial, Educación en Valores y las Competencias Básicas (por tanto implica a toda la Comunidad Educativa y se integra de modo transversal en el Proyecto Curricular) y que tiene como núcleo central el desarrollo de dos conceptos de especial relevancia en la Psicología Positiva:
LA ATENCIÓN PLENA (mindfullness)
LA EDUCACIÓN DE LAS 24 FORTALEZAS PERSONALES
Los autores: Arguís Rey, Bolsas, Hernández y Salvador, explican:
“La felicidad de nuestros alumnos puede ser un objetivo a alcanzar en el futuro. Pero, mediante las propuestas educativas que ofrecemos, puede convertirse en una meta a alcanzar también en el día a día, haciendo del aprendizaje y de la etapa de escolarización un período donde, a la vez que disfrutamos, aprendemos a ser felices en el aquí y ahora, sin descuidar por ello la importancia del pasado y el futuro” (2010. 11).

Os dejo el enlace para descargar el libro en el que los anteriores autores explican este programa fundamentado en la psicología positiva y que fue  una iniciativa pionera en España. No ha sido publicado pero se puede conseguir por internet, ya que el deseo de los autores es permitir su libre difusión y reproducción.  Aulas Felices (Equipo SATI)


martes, 30 de abril de 2013

POR 4 ESQUINITAS DE NADA

La diversidad es un hecho, una realidad, en la escuela, en la vida…. Todos somos diferentes.

La integración de niños diferentes o niños con necesidades educativas especiales, no sólo es beneficiosa para ellos, sino que mejora la calidad educativa. Ya que éstos, al crearse espacios de aprendizajes mutuos, podrán prepararse más eficazmente para interactuar luego en el ámbito laboral. La escuela capaz de atender la diversidad, es la escuela capaz de atender la realidad de su alumnado, es la escuela que responde adecuadamente a las diversas necesidades y capacidades de sus alumnos y los ayuda, por tanto, a progresar.

Una escuela inclusiva no se refiere sólo a los niños tradicionalmente etiquetados con discapacidades, sino que apunta a un grupo mucho mayor, el formado por niños que por diferentes razones tienen dificultades para aprender y que frecuentemente abandonan la escuela porque sus necesidades educacionales no son identificadas ni satisfechas. 

Atender la diversidad escolar supone valorar y acoger a cada alumno por ser quien es, sin ningún tipo de discriminación por razón de sexo, procedencia, raza, nivel social, sobredotación o discapacidad. Una educación de calidad, es aquella que ayuda a progresar en aprendizaje y actitud a cada individuo y ello requiere la adaptación de currículos, metodologías didácticas, materiales y recursos para las necesidades y capacidades diversas de los alumnos. Este es el camino hacia una educación equitativa y de calidad.

Hay que aprender a mirar a las personas en la medida de sus capacidades, potencialidades y diferencias, antes que sus carencias y limitaciones.
Os dejo este vídeo, a ver qué os parece....

 

domingo, 28 de abril de 2013

APRENDIZAJE SIGNIFICATIVO DENTRO DEL AULA


Los nuevos conocimientos se incorporan en la estructura cognitiva del alumno, esto se logra gracias a un esfuerzo consciente del alumno por relacionar los nuevos conocimientos con sus conocimientos previos.
Esto es producto de una implicación afectiva del alumno, es decir, el alumno quiere aprender aquello que se le presenta porque lo considera valioso. Ahora la pregunta es: ¿Qué situaciones favorecen este "querer aprender" dentro del aula de clases?

De verdad considero que el trabajo del docente es complicado pues, pondré un breve ejemplo: si se le pregunta a un estudiante qué le gusta hacer, sus respuestas serán cosas como: escuchar música, salir con amigos, bailar, ir al cine, practicar algún deporte, en fin, cosas que les divierten, y si nos damos cuenta, ninguna de esas actividades se relaciona con el asistir a clases, pues para un joven estudiante, el pensar en escuela es pensar en trabajos, prácticas y estrés, mucho estrés.

Es aquí donde el docente se encuentra con su primera barrera: el alumno no siente placer al asistir a clases, al contrario, el asistir a clases es una obligación, y al no sentir placer, el alumno se predispone a no querer esforzarse por encontrarle significado a los temas que se ven en clase, entonces: ¿cómo lograr que el alumno encuentre valiosa cierta información cuando se tiene una predisposición negativa a la clase?

El trabajo del docente se convierte pues en:

1.- Proporcionar información relevante y productiva para los alumnos.
2.- Presentar esa información de forma atractiva para que los mismos alumnos logren encontrar valor a lo que se les presenta.


Aquí es cuando la producción de materiales didácticos (incluyendo los medios audiovisuales) se convierten en el mejor amigo del docente, pues le ayudarán a crear un ambiente atractivo para los alumnos. 
La producción de material didáctico permite acercar al alumno la información que se desea que aprenda. Ese hecho ayuda al mismo alumno a encontrarle el valor y significado al conocimiento adquirido.
Este sentimiento por parte del alumnado es vital, ya que el ser humano tiene la disposición de aprender de verdad sólo aquello a lo que le encuentra sentido o lógica. El ser humano tiende a rechazar aquello a lo que no le encuentra sentido. El único auténtico aprendizaje es el aprendizaje significativo, el aprendizaje con sentido. Cualquier otro aprendizaje será puramente mecánico, memorístico, coyuntural: aprendizaje para aprobar un examen, para superar la materia, etc.

jueves, 18 de abril de 2013

Aprender o Ser Enseñado

Hasta los años 70 del siglo pasado, “Yo enseño: tú aprendes”, era el paradigma básico de la educación. Pero esto ha significado manipulación de conducta. Y no realización, desarrollo y crecimiento personal. Pues el conocimiento no se transmite, se comparte, siempre que la comunicación llegue a darse en un plano de igualdad. Porque comunicar es compartir un mismo lenguaje de palabras, sentimiento y pensamiento.
Más de 40 años después, ya sabemos que la enseñanza no garantiza el aprendizaje y que, incluso a veces, lo limita.
Algunos docentes son exageradamente autoritarios…
Otros solo repiten lo escrito en los libros…
Y otros intentan hacer algo aunque estén totalmente confundidos…
Y así, cada docente hace lo que sabe, lo que puede, o lo que quiere…

La educación conductista es demasiado limitadora por la memorización y el mecanicismo. Como el aprendizaje de las tablas de multiplicar, el aprendizaje de las reglas ortográficas…

Hay una frase que identifica a Ausubel como un precursor del congnoscitivismo: “valora lo que un estudiante ya sabe y actúa en consecuencia”. Con esto propone que todo aprendizaje debe partir de un conocimiento previo. En la actualidad el aprendizaje ya no se sustenta en un modelo, porque depende de múltiples factores. Y no se da del mismo modo, ni en las mismas condiciones, ni en el mismo grado, en dos o más personas. Porque el aprendizaje es una experiencia múltiple y singular.

Sin embargo, todos los aprendizajes son producto de la percepción y del pensamiento asociativo y se memorizan primero para luego ser recuperados, por ejemplo, en un examen, o en la vida laboral, o en las relaciones interpersonales.

Lo que hace complejo el aprendizaje son las diferentes maneras de  interiorizar la imagen o el concepto. A través de los canales visual, auditivo, sensorial… De modo que hay aprendizajes que se sustentan en la percepción visual, otros en la percepción auditiva, y otros en la percepción sensorial y en la psicomotricidad. Aunque, generalmente, aprendemos por los tres canales, también es cierto que preferentemente usamos uno de ellos. El aprendizaje es, más bien, algo que se construye entre lo que se ve, lo que se escucha y lo que se piensa.

La psicología cultural determina la disposición de aprender o ser enseñado. Pone el énfasis en el contexto familiar, es decir, que éste facilita o limita el proceso de aprender. El resultado es que el mundo social está construido por todos, e interactuando entre todos construimos también el mundo del conocimiento.

Piaget y Vigotsky definen de diferente manera el contexto en que se da el aprendizaje.
        Piaget lo ubica en la realidad natural y artificial del niño; y lo sustenta en los esquemas circulares primarios, que definen el estilo de aprendizaje futuro.
     Vigotsky lo sitúa en el mundo social y cultural y define la zona de desarrollo próximo como resultado de la cercanía afectiva y la confianza que genera el ambiente.

Y entonces, el aprendizaje ya no es algo que se recibe o se adquiere de la enseñanza, sino una construcción social en la que intervienen los demás, incluido el maestro, pero no como figura administradora. Porque hay dos formas de aprendizaje: el inducido y el que asumimos nosotros emocionalmente.

Como conclusión podemos decir que el aprendizaje significativo se construye a partir de una negociación social, es decir, que el individuo aprende sólo aquello que le es útil para la construcción de su propia identidad. Y esto le lleva a crear una visión del éxito para sí mismo, y para la comunidad.

viernes, 5 de abril de 2013

SI HAY UN APRENDIZAJE INVISIBLE, ¿HAY TAMBIÉN UNA ENSEÑANZA INVISIBLE?


Para mí aprendizaje invisible:


  • son los conocimientos adquiridos por medio de las experiencias personales, que no pueden medirse, que no pueden observarse (de ahí lo de invisibles) pero que existen, que están ahí y que tienen un papel fundamental en el proceso de aprendizaje continuo y que nos ayudan a aprender a aprender.
  • son habilidades de aprendizaje que no se enseñan en nuestro sistema educativo y que ya son necesarias en la sociedad actual, basadas en la innovación, el aprendizaje continuo y en cómo promover el pensamiento crítico frente a la forma de educación actual.

  • es saltar los límites de la educación formal, pensar en compartir y colaborar pensando en un aprendizaje continuo.


Para mí enseñanza invisible:

  • es el contacto diario con los niños  y los padres, en el colegio,  escuela, instituto.
  • es sobrevivir en una burocracia   que ahoga, con autoridades que limitan la creatividad e innovación docente, en días agotadores de correcciones y pruebas, en medio de las críticas de un sistema que no valora su labor y tampoco reconoce su trabajo.
  • es reinventarse, buscar nuevas estrategias de  enseñanza-aprendizaje, juegos creativos, redes sociales…
  •  es construir puentes entre la educación y la tecnología.
  •  es utilizar sistemas de evaluación que estimulen la posibilidad de desarrollar nuevos aprendizajes.